jueves, 18 de agosto de 2011

¿Y en Octubre?

El contundente resultado de las elecciones primarias no deja mucho lugar para hacer interpretaciones, ¿o no?

Bueno, parece que no, porque ya se agita el discurso de qué pasa con los diputados.

Pero para saber qué va a pasar con los diputados, creo yo que tenemos que revisar qué pasó con los diputados los últimos dos años.

Desde las elecciones de 2009, el Frente para la Victoria tiene 87 diputados en el Congreso. Para que el congreso funcione hacen falta 129 diputados presentes. En consecuencia, cada vez que era necesario aprobar una ley, los diputados tenían que negociar para que 42 diputados de otros partidos asistieran a la reunión. ¿Cómo les fue?
Bastante mal.

Para muestra basta un botón, en este caso "Pino" Solanas. Su bloque había presentado un proyecto de ley para regular la producción de papel para diarios. El kirchnerismo decidió apoyar ese proyecto. Y así, con el apoyo de varios bloques, la ley iba camino a ser aprobada. Pero no, en vez de apoyar el proyecto que ellos mismos habían propuesto, decidieron retirarlo, para que no se apruebe una ley acorde con los planes del gobierno. Repito: lo importante para ese bloque de opositores no era aprobar un proyecto con el que estaban de acuerdo (y estaban de acuerdo porque ellos mismos lo habían escrito), sino hacer todo lo posible porque al gobierno se le dificultaran sus planes. Ese fue el rol asumido por la "mayoría opositora" durante los últimos años.

Un ejemplo más: en una comisión el GEN presentó un dictamen, el Frente para la Victoria, decidió apoyarlo, y así entre los dos bloques lograban mayoría de los presentes en la reunión de comisión. Graciela Caamaño (del duhaldismo), intentó que se interrumpiera la reunión, pero Kunkel exigíó que se firme el dictamen en ese mismo momento. Ante la imposiblidad de evitar que el bloque oficialista llegue a un acuerdo con otros bloques, la diputada Caamaño no encontró mejor manera de detener la reunión que pegarle una trompada a Kunkel.

¿Por qué cuento esto? Para intentar ilustrar para qué es que muchos opositores quieren llegar al Congreso: no para controlar al gobierno y apoyar las medidas que consideren acertadas, sino para boicotear todos los proyectos oficiales (no todos hicieron lo mismo, por ejemplo los diputados de Nuevo Encuentro apoyaron las medidas que consideraron correctas).

¿Hay posibilidades de que esto cambie?

Una posibilidad sería que el gobierno saque tantos votos que llegue a los 129 diputados propios, entonces ya no dependería de otras fuerzas. Pero ese resultado no es viable.

Si se repitiera en Octubre el abultado resultado de Agosto, el Frente para la Victoria llegaría a tener 106 diputados. En esas condiciones, siguen haciendo falta 23 diputados más para lograr que el congreso funcione. Bastante lejos todavía, pero cuanto más pequeña sea la distancia, más factible será encontrar fuerzas opositoras razonables que puedan habilitar el debate en el Congreso. Por eso creo que hacer el esfuerzo para achicar esa brecha es importante de cara al funcionamiento del país en los próximos años.

miércoles, 1 de junio de 2011

Oligarca Caballero

Ayer, en una velada peronista, con sanguchitos de carne y coca cola (el peronismo ya no es lo que era, qué va'cer), un compañero, que además de un gran militante y un profesional muy capaz resultó ser un buen cantor, nos interpretó a capela esta canción.

Yo recordaba que en algún lugar había sido editada, pero no recordaba cuándo ni dónde. Así que recurrí al libro gordo y acá está.

Para todos, "Oda a Perón", interpretada por Alberto Marino, en una grabación de 1947 (dale paly)
La música es de Marino García, que la compuso para otra letra. No pude averiguar de quién es la letra.


Oligarca caballero prototipo de negrero
que explotaste al obrero sin tenerle compasión
ha sonado la campana anunciando el nuevo día
para el pueblo que veía en Perón su salvación.

Oligarca caballero que fumás cigarro habano,
que vivís en la abundancia porque sos explotador,
que jamás supo tu mano ni de pico ni de pala,
para vos de entrañas malas sólo queda la prisión.

Vendepatria que entregaste el transporte al extranjero,
que te nutres con dinero del sudor de los demás,
democrático exiliado sos allá en Montevideo
pero aquí te llaman reo por el código penal.

La Argentina tiene un líder, un patriota esclarecido
que gobierna para el pueblo y se llama Juan Perón,
que por ser hombre derecho con los hechos ha respondido
al llamado de la Patria para el bien de la Nación.

¡Viva Evita! gritan todas las mujeres argentinas.
Viva Evita eternamente nuestra jefa espiritual,
que en la obra más humana, más cristiana, más divina,
ha luchado junto al líder por justicia y libertad.

Menos pobres, menos ricos, sin mezquinos sentimientos:
es el lema del gobierno hecho carne en la Nación
de este pueblo de argentinos de elevados pensamientos
que jugándose el destino da la vida por Perón.

Fuentes: este blog, este otro, y todotango.com

lunes, 23 de mayo de 2011

Ley de caducidad en Uruguay.

El 19 de Mayo debía votarse la anulación de la Ley de Caducidad en Uruguay. El frente amplio contaba con los votos necesarios para anular esa ley. Pero el diputado Semproni se retiró antes de votar para dejar la situación en un empate.

Menudo regalo para el presidente Mujica, que cumplió 76 años el 20 de Mayo.

A continuación transcribo un reportaje que le hicieron al "Pepe" en Colonia durante su cumpleaños.


- Mujica. ¿Cómo vivió la jornada de ayer donde no se logró anular la ley de caducidad?
Es una pena que no se haya redondeado la decisión. Pero bueno, lo imposible cuesta un poco más. Será un tema pendiente.
- ¿Cómo va a ser el futuro del diputado Victor Semproni de aquí en más?
A, no... Yo no puedo. Serán cuestiones que debata la fuerza política. Hice lo posible para que acompañara la decisión de la fuerza política, pero no tuve suerte.
- ¿Y cómo lo ve esto a futuro? ¿Se logrará en algún momento anularla?
Yo creo que alguna respuesta se va a dar. Lo que más me preocupa son los familiares que hace mucho tiempo que están buscando saber dónde están sus huesos queridos. Y eso el país lo tiene que tratar de suturar de alguna manera.
- ¿Qué le parece el planteamiento que hizo Semproni respecto a la decisión por la cual no quería votar?
Razones pueden haber muchas. Cualquier proyecto que se presente puede ser difícil. Pueden haber muchas cosas. Pero a mí me preocupa la unidad de acción de la fuerza política, lo cual no quiere decir que todos piensen igual. Una fuerza libre tiene que tener libertad de opinión. Pero llega un momento en que cuando se toma la decisión hay que acompañar. Y no quisiera que se quiebre eso.
- ¿Usted piensa que puede haber algún quiebre político de aquí en más?
No. Pienso que no. Que tenemos el grado de madurez suficiente...

domingo, 1 de mayo de 2011

Nunca más la teoría de los dos demonios

Desde hace un tiempo, cada vez que 'la oposición' critica una medida, descubro una decisión acertada del gobierno que vale la pena defender. Magdalena aprovechó la muerte de Sábato para traer una discusión de hace cinco años. Yo aprovecho el despropósito de Magdalena para reivindicar la política de derechos humanos.


Se murió el gran escritor, autor del prólogo al informe sobre desaparecidos y, "con total desaprensión de las reglas más elementales de la cultura, al prólogo del informe 'Nunca más' que firmaba Ernesto Sabato, se le adosó (durante el gobierno del presidente Néstor Kirchner) otro prólogo superpuesto. Sería interesante que quienes fueron responsables de este atropello intelectual se reunieran y elaboraran otro informe 'Nunca más', pero sobre los crímenes de la Triple A que ocurrieron bajo el gobierno constitucional de Isabel Perón" (Magdalena Ruiz Guiñazú dixit)

Está hablando de que en el año 2006 se agregó un nuevo prólogo al informe 'Nunca Más', en la reedición que se hizo a 30 años del golpe militar. ¿Tan raro es que en una reedición se agregue un nuevo prólogo? Pero esto le molesta a Magdalena. Le molesta porque el objetivo de este nuevo prólogo es responder algunas cosas escritas por Sábato que no están tan buenas.

Aclaremos un poco más, el prólogo escrito por Sábato arranca así: "Durante la década del 70 la Argentina fue convulsionada por un terror que provenía tanto desde la extrema derecha como de la extrema izquierda..."

El nuevo prólogo responde a esta cuestión aclarando que no hay justificación posible para el terrorismo de estado. Y profundiza: "La dictadura se propuso imponer un sistema económico de tipo neoliberal y arrasar con las conquistas sociales de muchas décadas, que la resistencia popular impedía fueran conculcadas. [...] En la aplicación de estas políticas, con la finalidad de evitar el resurgimiento de los movimientos políticos y sociales la dictadura hizo desaparecer a 30.000 personas".

Durante muchos años criticamos la teoría de los dos demonios y pedimos castigo a los culpables de las desapariciones. El gobierno dio el impulso necesario para que se hagan realidad los objetivos de tantos años de lucha. Esto, que debería ser motivo de alegría, ofende a cierta gente. Porque les quita protagonismo ("si yo siempre luché por esto, ¿qué vienen ahora a hacerse los defensores de derechos humanos?")

Pero esto solo no explica todas las reacciones. Si releemos, salta a la vista que el concepto de Derechos Humanos defendido hoy es un poco más amplio. Que incluye, además, enfrentar a la economía liberal impuesta por la dictadura. Y esto, seguro, les tiene que molestar a los defensores de esa economía liberal.

Los dejo con otro párrafo del prólogo a la nueva edición del 'Nunca Más'

"Actualmente tenemos por delante la inmensa tarea de revertir una situación de impunidad y de injusticia social, lo que supone vencer la hostilidad de poderosos sectores que, con su complicidad de ayer y de hoy con el terrorismo de Estado y las políticas neoliberales, la hicieron posible. Por ello al mismo tiempo nos interpelan los grandes desafíos de continuar haciendo de la Argentina, frente a esas fuertes resistencias, no sólo un país más democrático y menos autoritario, sino también más igualitario y más equitativo."

jueves, 14 de abril de 2011

La calidad del voto



Periodista: ¿Y cómo explica el número de Urtubey? La reelección de Urtubey con números tan elevados ¿no?

Pino: Y, bueeno. Todo eso es dependencia laboral, es dependencia, es clientelismo, es todo eso. Y también poca for..., y también, este.. poblaciones con muy poco acceso..., muy poco nivel cultural. Todas esas cosas cuentan.

Periodista: Pino, ese análisis que usted hace, por ejemplo, de la situación en la provincia de Salta y de la reelección de Urtubey con números históricos, ¿no es subestimar al electorado también? Desde el punto de vista de la participación ciudadana.

Pino: Bueno. No sé. No sé como llamarlo, yo creo que está mal. Yo creo que está mal, pero en general todas esas provincias, las provincias más pobres, no se caracterizan por tener la mejor calidad del voto

Periodista: ...

Pino: Es así.

Cuando un compañero me comentó este dialogo, no lo podía creer. Suponía que debía ser una exageración. Hasta que ese engendro moderno que es la televisión me mostró la verdad de lo perdido que está el viejo.

Es tan obvio que resulta aburrido señalar la tilinguería del planteo. "Yo, que pasé por una universidad, sé cómo se hace política. Los pobres no". No sólo los excluye de la participación política, sino que descalifica también su voto. "Estos pobres no entienden nada, "por su incultura son incapaces de distinguir qué gobierno los favorece y qué gobierno los perjudica, de manera que apoyan y votan a sus explotadores".

Llama la atención cómo titubea buscando la forma menos desagradable de decir lo que tiene que decir. Y lo que dice es que Urtubey es clientelista, porque genera trabajo en Salta, y porque da planes sociales para los que no consiguen trabajo. Y como los salteños quieren trabajar, el 56% lo votó a Urtubey. La gente de Pino, en cambio, promete cerrar minas. Y como la gente de Salta quiere seguir trabajando, solamente el 2% de los salteños los votaron.

Y Pino dice algo con lo que sí coincido "yo creo que está mal". Yo también creo que lo que Pino dijo está mal.

¿Por qué habría que excluir a los más humildes de la participación política?

De una compañera de un barrio periférico de La Plata escuché la descripción más clara de la inclusión social, parafraseo de memoria su discurso: "Mi hijo mayor tiene secuelas de desnutrición. Antes yo necesitaba tener dos trabajos. Y ni así me alcanzaba para darles de comer. Ahora gracias a la Asignación Universal, mis hijos están más sanos. Y gracias a que aumentaron los sueldos a mí me alcanza con un solo trabajo. Y por eso tengo más tiempo. Tengo más tiempo para pensar. Y por eso puedo estar hoy acá sentada hablando con ustedes".

...

Para comparar, un video que le robé a Ana. Fíjense en este dirigente, que según Pino tendría "poco nivel cultural", fíjense como este sí habla de corrido, sin miedo a las palabras que usa.

viernes, 8 de abril de 2011

El miedo a los fantasmas

Hoy hay un paro en los hospitales porteños.
Hace unos días murió un hombre en la villa 31 porque la ambulacia no entró a socorrerlo.

Ambos hechos están vinculados por el miedo a "la inseguridad".

El paro de la Asociación de Médicos Municipales es en reclamo de un escenario seguro para brindar el servicio de salud. ¿Pero qué significa esto? Leemos algunas notas de estos días, en las que se escriben frases como "hay dos policías en la puerta del hospital pero no es suficiente". ¿debería haber un policía en cada consultorio?

Más importante, por lo grave, es el caso de la villa 31. El personal de la ambulancia no quiso entrar a la villa. Aparentemente se negaron también a prestar la camilla a los vecinos. La médica volvió al hospital con un ataque de pánico, según un subsecretario del gobierno porteño.

Hay médicos que sienten que no pueden atender a un paciente sin un policía para protegerlos. Los enfermeros no prestaron la camilla a los vecinos (¿por miedo a que se la roben?). A una doctora la idea de caminar los pasillos de la villa le provocó un ataque de pánico.

Estos miedos son reales. Son tan reales que paralizan. Paralizan tanto que pueden provocar muertes. Miedo. ¿Miedo a qué? Los hechos mencionados por delegados gremiales: robo de un celular, un cachetazo dado por una persona drogada, y no mucho más. Los hechos son reales, pero no creo que justifiquen un ataque de pánico. Tampoco dejar que una persona muera.

La mujer con un ataque de pánico es también víctima. Una víctima de un discurso repetido hasta el hartazgo. De la construcción de un fantasma. De un fantasma al que nos obligan a tenerle miedo.

No voy a decir que no existan los robos. Tampoco negaré que una persona drogada o borracha sea más propensa a actos violentos. Pero exagerar los hechos conduce al miedo irracional, al pánico. Y creer que todos los habitantes de una villa son borrachos o drogadictos es tan estúpido como creer que todos los ladrones son pobres.

Subliminarmente en toda esta cuestión hay un elemento discriminatorio y racista.

...

El fantasma de la inseguridad nos hace actuar de manera irracional. Y los fantasmas no existen, pero este fantasma provoca muertes. Lo único bueno de todo esto, es que los fantasmas desaparecen cuando dejamos de tener miedo.

miércoles, 23 de marzo de 2011

La Represión

Veo hoy la presentación del informe de la correpi de noviembre del año pasado (sí, ya sé que estoy atrasado, lo que vi es una recirculación de aquel video hecha con motivo de cumplirse otro aniversario del golpe).

Al verlo algo me hace ruido. Y es el telón de fondo del escenario. Dice "distintos gobiernos, la misma represión". Y me pregunto ¿es esto así? Para responderme esta pregunta me pongo a desglosar lo que la correpi dice. Y si a alguien le interesa puede leerme y responderme.

La correpi clasifica la represión en dos categorías, el "gatillo fácil" y lo que ellos llaman "represión selectiva", definida como represión de las manifestaciones políticas.

Empecemos por el "gatillo fácil". Lo que dice el informe es que esto no se ha modificado sustancialmente desde hace muchos años. Veamos algunas causas de esto. El "gatillo fácil" tiene un claro componente racista y clasista. Está profundamente vinculado con la formación de la policía. Y dado que la formación de la policía no se ha modificado sustancialmente desde hace muchos años, difícilmente se modifique esta situación.

La correpi hace una afirmación al respecto que me parece dudosa. Dice que el "gatillo fácil" es una política de estado que sirve para disuadir a las personas de la participación política. No me parece que sea así. Sí es una forma de contención social, en el sentido que intenta generar sumisión a la autoridad policial. Pero no se trata de una represión contra la política sino basada en prejuicios, y en ocasiones provoca reacciones en respuesta con mayor o menor nivel de organización.

Cambiar la formación de una fuerza como la policial no es una tarea sencilla. Como antecedente menciono la reforma de los liceos militares impulsada por Nilda Garré durante su paso por el Ministerio de Defensa, que incorpora una materia sobre "problemáticas ciudadana", reduce el uso de armas de fuego, elimina la obligatoriedad del internado, promueve la articulación con universidades públicas y propone revisar el régimen disciplinario. Esta resolución está siendo resistida por los egresados de estos liceos, que quieren que sus hijos tengan la misma formación que ellos tuvieron.

No sé si Garré tiene en sus planes una modificación de los liceos policiales (ni tampoco sé si tiene atribuciones para meterse con las policías provinciales), pero sería interesante ver qué pasaría si lo intentara.

Pero volvamos para ver qué pasa con la otra categoría de represión mencionada por la correpi, la "represión selectiva". Esto es lo que más nos suena en una fecha como esta, en la que recordamos el inicio de la gran represión política de la que fuimos víctimas los argentinos. Dice la correpi que la represión de hoy es la misma desde hace 15 años. Y me pregunto ¿es así? No pude leer el informe completo, pero en los lugares que reproducen partes del informe hablan de que en 15 años hubo cincuenta y pico asesinatos cometidos en el marco de manifestaciones populares (por ejemplo, acá o acá). La lista caso por caso es larga, por eso la pongo al final.

Analicemos un poquito la lista. Los casos mencionados del 2010 contrastan con los anteriores por los siguientes motivos. El caso de Ferreyra es el único asesinato de toda la lista en el que los responsables no son policías y los otros casos mencionados en el 2010 son manifestaciones que se produjeron en respuesta a un caso de gatillo fácil. En cambio, todos los casos mencionados de años anteriores son asesinatos producidos durante la represión a manifestaciones de trabajadores por reclamos gremiales (excepto la de Ledesma en 2003). ¿Cuál es el motivo de esta mezcla en la lista?

Me parece que la incorporación de estos casos más relacionados con el "gatillo fácil" en la lista de crímenes políticos produce una tergiversación del análisis de la realidad. Y también produce una tergiversación de la realidad las cosas que no se ponen. Por ejemplo no hay mencionado ningún caso de los varios asesinados en comunidades aborígenes que reclaman sus tierras. Tampoco están mencionados los muertos en las tomas de terrenos en Buenos Aires.

Y es que la correpi quiere forzar la conclusión que tomó como premisa, "distintos gobiernos, la misma represión". Y si hay que mencionar que el gobierno envió a la gendarmería para evitar que las patotas siguieran matando a los que tomaban tierras en Buenos Aires, mientras la oposición les pedía que reprimieran, es difícil sostener esa premisa.

Porque esa premisa es falsa. La represión política hoy no es lo mismo que hace unos años. En las manifestaciones, las fuerzas que dependen del estado nacional  van sin armas, y esto es una clara diferencia (a veces exasperante: cuando una banda quería entrar a matar a los que tomaban el parque indoamericano, la gendarmería se quedó ahí, bloqueandoles el paso, recibiendo piedras y palazos, sin responder).
Si hoy buscás en Internet información sobre presos políticos, lo primero que encontrás es a los más de 800 tipos presos por crímenes cometidos durante la dictadura.

No estoy diciendo que hoy vivamos en la panacea, cosas como el gatillo fácil siguen existiendo. Lo que digo es que no todo es lo mismo. No es lo mismo el actual gobierno que un hipotético gobierno de Duhalde o Macri o Carrió, que están diciendo que lo que hace falta es más represión. Y el sostener que todo es lo mismo nos deja expuestos a lo peor.

Cualquier mejora en la situación nos da una plataforma desde donde dar el siguiente salto. Y las ventajas de que disfrutamos hoy no son nada despreciable.

Listado de casos mencionados en el informe de correpi:
1995, En una manifestación de la UOM contra los despidos y cierres de fábricas es asesinado Victor Choque por la policía de Tierra del Fuego
1997, Durante un corte de ruta de ATEN y desocupados (contra la ley de educación de Menem y pidiendo planes sociales), Teresa Rodríguez es asesinada por la policía de Neuquén. Los policías responsables fueron condenados a dos años de prisión en suspenso y reincorporados a la fuerza.
1999, Un corte del puente Chaco-Corrientes impulsado por varios sectores en reclamo de sueldos atrasados es reprimido por la gendarmería y dos manifestantes son asesinados. Por la mañana la policía correntina forma un cordón para evitar que la gendarmería siguiera reprimiendo. Hacía siete días que había asumido el gobierno de De La Rúa. Los asesinatos quedaron impunes.
2000, Durante un corte de ruta de desocupados y despedidos de dos empresas de General Mosconi (Salta), la policía salteña asesinó a Aníbal Verón.
2001, La UTD con obreros de la construcción realiza un corte para pedir aumento de sueldos. La gendarmería asesina a dos manifestantes. Estos crímenes están impunes.
2001, En el marco de las manifestaciones que provocaron la renuncia de De La Rúa hubo 39 asesinatos por parte de la policía federal y de algunas provincias. Estos crímenes están impunes.
2002, Un corte de varias organizaciones piqueteras es desalojado por un operativo conjunto de la gendarmería, la prefectura naval y la policía bonaerense. Dos manifestantes fueron asesinados. Este hecho provocó que Duhalde adelantara su retiro del gobierno para mayo del año siguiente. Los policías responsables fueron enjuiciados. Las responsabilidades políticas no se esclarecieron.
2003, Un militante de la CCC aparece ahorcado en una celda de una comisaría. Durante la manifestación de protesta la comisaría es destruida, y en la represión es asesinado otro militante de la CCC. Un policía fue enjuiciado por este segundo asesinato, pero ninguno por el primero.
2007, Durante una manifestación de ATEN, Fuentealba murió por una granada de gas lacrimógeno que le pegó en la cabeza disparada desde corta distancia por la policía de Neuquén. El policía que disparó la granada fue condenado. Se inició juicio político contra el gobernador Sobisch, pero fue parado por el partido MPN.
2008, Una manifestación de trabajadores del ajo fue reprimida por la policía de Mendoza. Uno de los heridos murió a los dos días por una contusión cerebral.
2010, Un hombre de 60 años murió al quedar en medio de un tiroteo entre policías y ladrones de autos. Cuando los vecinos cortaron las vías para reclamar que se esclarezca el hecho, un joven fue asesinado por la policía. Ninguno de los dos crímenes fue resuelto.
2010, Un chico de 15 años fue asesinado por un agente policial en Bariloche. Sus vecinos atacaron y destruyeron la comisaría. Durante la represión otros dos chicos fueron asesinados. El agente que asesinó al primer chico fue condenado. Los otros dos asesinatos están impunes. Después de estos hechos hubo manifestaciones de otros vecinos a favor de la policía.
2010, Un intento de corte de vías por trabajadores tercerizados del tren fue boicoteado por el sindicato. Durante la retirada fue asesinado uno de los manifestantes. Los responsables del asesinato están siendo juzgados.

volver

martes, 22 de marzo de 2011

Si la tocan a Cristina, qué quilombo se va a armar.

Che Gorila, che gorila,
 no te lo decimos más,
 si la tocan a Cristina,
 qué quilombo se v'armar.


Se trata de un clásico de las manifestaciones en Argentina. Desde hace una pila de años, con sus variantes de acuerdo a cada época y contexto, fue coreada en las calles. A éste cántico lo escuché y lo desentoné cientos de veces. Sin embargo hubo una ocasión en la que me provocó algo diferente. Ocurrió durante los funerales de Néstor Kirchner. En ese momento, al escucharlo, se me hizo un nudo en la garganta.

Ya pasó suficiente tiempo como para poder auto-psico-analizarme, y por eso me zambullo ahora a escribir esto. ¿Qué fue lo que me provocó esa reacción?

Claramente, ese grito es una compadreada. Así marcamos la cancha y les decimos a nuestros adversarios:  hasta acá, después de acá estamos dispuestos a todo; si cruzan esta marca, qué quilombo se va a armar. Es como el "quiero, retruco".

Pero si se trata de un compadreada, ¿por qué esa vez me dio miedo?

Cuando retrucás con con una carta ganadora no hay por qué tener miedo. Pero... ¿la memoria me fallará? ¿esa carta que dejé descuidadamente sobre la mesa, para disimular, ganará realmente?.. No..., no puede ser ese el origen de este espasmo en la garganta. Estoy seguro de que esta es la mejor carta que tuve en mucho tiempo, y que ahora es cuando tengo que jugarme la parada. Si no aprovecho esta oportunidad puede demorar mucho en llegar otra carta parecida. ¿Entonces, por qué me sentí así?

Sigamos con la alegoría con naipes, que está empezando a gustarme.

La situación que vivía(mos) durante el funeral de Kirchner se me antoja parecida a esto: habíamos perdido la que parecía nuestra carta más fuerte, y nuestro rival, un ricachón acostumbrado a ganar, ya estaba alardeando ante sus amigos diciendo que nos íbamos al mazo, que así Él iba a recuperar lo que injustamente le veníamos ganando. Y entonces gritamos "Quiero! Retruco!"... (si la tocan a Cristina qué quilombo se va a armar). Y el tipo nos mira sin entender. ¿Cómo reaccionará? Él no sabe perder. Por lo que cuentan, nunca perdió. ¿Pateará el tablero y se nos vendrá encima?

Por ahí, por ahí venía mi miedo.

Si perdemos ahora nuestros rivales vendrán a quitarnos lo ganado. Y ahí sí, qué quilombo que se va a armar. Y ese quilombo no será alegre, el sólo imaginarlo me da miedo. Creo que sí, que por ahí venía esa especie de angustia. Si perdemos ahora, si se nos pasa esta oportunidad o alguien nos la quita, entonces perderemos mucho.

Por suerte nadie pateó el tablero. El juego continúa y llevamos las de ganar. Nuestro rival, que en aquel momento quedó perplejo por nuestro retruque, ahora está empezando a entender que puede perder. Como en el truco, el pavoneo y el alarde son parte del juego. Y nuestro rival muestra la punta de su carta, lo que nos tiene preparado si en algún momento les dejamos tomar la iniciativa.

Por eso desde La Nación y Clarín tiran consignas que, bien leídas, resultan amenazas. Y las repiten una y otra vez: "Reprimir no significa transgredir las normas, sino reponerlas cuando alguien las ha transgredido." (así, textualmente, lo escribieron acá, acá y acá, para asegurarse de que lo leamos).
Sus columnistas intentan darle mayor contenido filosófico a la consigna:
"Cuando una sociedad no tiene en claro la noción del orden, oscila bruscamente entre la anarquía y la tiranía, sin hallar el justo medio del orden democrático. En 1976, cuando se extendía entre nosotros la anarquía montonera, fueron muchos los que reclamaron un gobierno fuerte." Mariano Grondona.
"En un país preocupado y sensibilizado por la inseguridad, tanto la usurpación de espacios públicos como los enfrentamientos entre quienes los ocupan y los que viven en la zona, termina acentuando la percepción de inseguridad que hoy sufre gran parte de la población." Rosendo Fraga.
"Cristina tendrá que cuidarse del poder de la calle." Mariano Grondona.

Y finalmente algunos dirigentes políticos la levantan como consigna de campaña.
Duhalde, reunido con Barrionuevo, dice que "reprimir no es matar a nadie, sino hacer respetar la ley".  Macri pide, exige, que la policía federal reprima donde él no puede contener la conflictividad social.

Ese es su juego, amenazan porque están empezando a dudar de su triunfo. Intentarán distraernos usando floreos con actitud de cancheros, con su labia de jugador veterano en estas lides. Nos querrán hacer dudar de nuestra propia fuerza; convencernos de que, aunque ganemos, no ganaremos. Hemos visto esto ya otras veces, aprovecharán cualquier desatención, cualquier titubeo, para sacarnos del juego. Habrá que permanecer atentos, sostener la mirada serena, con la tranquilidad del que se sabe ganador. Y habrá que jugar nuestra carta. En octubre. Y poner, con fuerza, las manos sobre la mesa. Para que nadie se atreva a patearnos el tablero. Conservaremos así lo que ya tenemos ganado. Y comenzará otra mano donde tendremos la oportunidad de nuevos logros.

lunes, 14 de marzo de 2011

Sobre un artículo de Vargas Llosa

Esta carta pretende ser una respuesta al artículo escrito por Vargas Llosa para La Nación del día 13/3/2011.
Antes de comenzar, quiero dejar constancia de que lamento que el director de la Biblioteca Nacional se haya expresado públicamente en contra de su participación en la Feria del Libro. Lo lamento por un lado porque creo que no correspondía que el Horacio González opinara en este asunto, y también lo lamento porque le dio la oportunidad de expresar sus opiniones políticas desde la postura de víctima. Aclaro esto, el señor Vargas Llosa no ha sido censurado finalmente; podrá, como es su derecho, expresar sus opiniones. Y expresará sus opiniones gozando del aura de simpatía que brinda el presentarse como un perseguido político. Hechas las sumas y las restas, la iniciativa de Horacio González ha contribuido a fortalecer la imagen de Vargas Llosa.
En el párrafo anterior he mencionado un intento de censura, y lo he hecho de un modo tal que me permite evitar hablar realmente del tema, logrando disimular la importancia que debería dársele a un intento de censura. Copié este truco literario de uno de los grandes escritores de la actualidad: Mario Vargas Llosa. En su artículo del día de la fecha en el diario La Nación dice “nunca he ocultado mi convencimiento de que el peronismo, aunque haya impulsado algunos progresos de orden social y sindical, hechas las sumas y las restas, ha contribuido a la decadencia económica y cultural...”.
“Algunos progresos de orden social y sindical”. Paso a enumerar algunos de estos logros, quizá alguno se me olvide: vacaciones, aguinaldo, salario mínimo, estatuto del peón rural, indemnización por despido, seguro por accidentes de trabajo, salario familiar, créditos para vivienda, hospitales de niños, ayuda para madres solteras, colonias de vacaciones... Son muchas cosas en el haber, las cosas malas del peronismo deben ser grandes para echar todo esto por tierra. Y casi me olvido de mencionar uno de los logros sociales más importantes: el voto femenino.
Pues pasemos a ver cuáles son las cosas negativas de las que Vargas Llosa habla, tan malas que a su lado los logros antes mencionados resultan nimios. “Decadencia cultural”: el turismo social permitió que muchas personas pudieran viajar a los centros turísticos del país, los torneos Evita acercaron muchos jóvenes al deporte, se creó el comité olímpico para fomentar el deporte de alta competición, se estableció la gratuidad de la educación universitaria, se creó la Universidad Obrera (hoy llamada Universidad Tecnológica Nacional)... Quizá para Vargas Llosa el turismo y el deporte no sean hechos culturales. Quizá no le parezca algo relevante que los obreros puedan cursar estudios de ingeniería. Hubo en el pasado quienes pensaban que estas cosas eran algo decadente; quienes así opinaban apoyaron el golpe de estado de 1955, con el bombardeo de la Plaza de Mayo incluido. Yo no pienso de la misma manera.
Vargas Llosa habla también de “decadencia económica”: durante el gobierno de Perón se pagó y canceló la deuda contraída por los gobiernos anteriores, se fomentó la industria usando el excedente de la exportación de granos para dar créditos blandos, se estatizaron las empresas de servicios y transportes y se crearon empresas industriales del estado. Todo esto está muy alejado de las ideas liberales, que Vargas Llosa describe: “aceptar ... la alternancia en el poder, el mercado, la empresa y la inversión privadas y las instituciones que antes (la izquierda) llamaba burguesas”. Estas ideas liberales, al menos en su aspecto económico, fueron llevadas adelante en la Argentina por los presidentes Menem y De la Rúa. Realmente, yo me quedo con el estatismo peronista antes que con el liberalismo menemista.
La diferente interpretación de la historia argentina es notable. Para mostrar que la diferencia va más allá de la opinión respecto a los gobiernos de Perón, cito otra frase de Vargas Llosa donde menciona “la triste vigencia en nuestros días de aquella confrontación entre civilización y barbarie que describieron con tanta inteligencia y buena prosa Sarmiento en su Facundo y Esteban Echeverría en ese cuento sobrecogedor que es El Matadero.” Coincido plenamente en la tristeza. Pero me ubico del otro lado (de la barbarie, si quieren llamarnos así). Y para justificarme cito una frase de Sarmiento, en su genial libro Facundo, seguramente el mejor escrito del liberalismo argentino. Dice Sarmiento que “El pueblo que habita estas extensas comarcas se compone de dos razas diversas, que, mezclándose, forman medios tintes imperceptibles, españoles e indígenas ... La raza negra, casi extinta ya -excepto en Buenos Aires-, ha dejado sus zambos y mulatos, habitantes de las ciudades, eslabón que liga al hombre civilizado con el palurdo; raza inclinada a la civilización, dotada de talento y de los más bellos instintos de progresos ... de la fusión de estas tres familias ha resultado un todo homogéneo, que se distingue por su amor a la ociosidad e incapacidad industrial, cuando la educación y las exigencias de una posición social no vienen a ponerle espuela y sacarla de su paso habitual. Mucho debe haber contribuido a producir este resultado desgraciado la incorporación de indígenas que hizo la colonización. Las razas americanas viven en la ociosidad, y se muestran incapaces, aun por medio de la compulsión, para dedicarse a un trabajo duro y seguido.” Sarmiento hubiera preferido que alguien matara a todos los indios y a todos los gauchos. Entre Roca y Mitre estuvieron muy cerca de hacerlo.
El racismo y el desprecio de nosotros, los habitantes de esta tierra, por parte de los más grandes ideólogos del liberalismo “civilizado” me impulsan a ubicarme en la vereda opuesta, del lado del “bárbaro” populismo.
Esta diferente interpretación de la historia tiene su correlato en la visión de la actualidad. Vargas Llosa festeja que, según su opinión, cierta parte de la “izquierda” latinoamericana “ha sido capaz de renovarse, renunciando no solo a sus tradicionales convicciones revolucionarias ... sino al populismo, al sectarismo y al dirigismo, aceptando ... el mercado, la empresa y la inversión privadas y las instituciones que antes llamaba burguesas”; en definitiva, dejando de ser izquierda. Yo no sé si es real que los gobiernos que menciona han cambiado de ese modo, o si sus opiniones solo son reflejos de sus deseos. De hecho yo dudaría de esta caracterización, aún sin conocer bien a aquellos a quienes describe.
No creo que se pueda ser populista y sectario a la vez. Para ser populista hay que estar con el pueblo (al menos, eso dice el diccionario), y para ser sectario hay seguir a una secta. ¿Un populista sectario sigue entonces a una secta formada por la mayoría del pueblo? ¿Qué opinión merecen los que quedan afuera, los antipopulares, o impopulares?
Por otro lado, difícilmente un grupo sectario pueda alcanzar el gobierno de un país. Acá tiene que haber alguna confusión en el uso de las palabras. El uso del adjetivo “populista” como una forma despectiva de su sinónimo “popular” suele provenir de algunos sectores de la izquierda, estos sí sectarios, que no pueden entender por qué el pueblo no los sigue a ellos, y se ofenden cuando otras personas, unos populistas que no pertenecen a su secta, llevan adelante las reivindicaciones que ellos, los izquierdistas sectarios, nunca pudieron concretar.
Pero por la confusión entre los izquierdistas sectarios y los populares populistas (sean o no de izquierda) se nota que en realidad lo que preocupa a Vargas Llosa es otra cosa. Se nota que lo que realmente le molesta es el “dirigismo” en contraposición al liberalismo económico del “mercado, las empresas y la inversión privadas”. ¿La libertad de qué mercados, empresas y capitales privados defiende el liberal Vargas Llosa? ¿La de las grandes editoriales que auspician la feria que inaugurará? ¿La de los oligopolios de la comunicación donde publica sus ideas?
¿La libertad de las empresas que brindan servicios de salud es más importante que el derecho de los ciudadanos a su propia salud? ¿Por qué está mal entonces que el estado intervenga restringiendo las libertades de esas empresas? ¿Por qué está mal que el estado dirija las negociaciones entre trabajadores y empresarios, de modo de evitar despidos arbitrarios y de garantizar derechos de los trabajadores? ¿Por qué está mal que el estado intervenga en la economía para fomentar las industrias que considere más importantes? ¿Está mal que el estado garantice la educación pública gratuita, en vez de la libertad de las universidades privadas? ¿Y la vivienda, es acaso menos importante que la libertad de hacer negocios inmobiliarios?
Me cuesta creer que las respuesta a estas preguntas no sean inmediatas. Pero se ve que para gente como Vargas Llosa ciertas libertades son más importantes que la justicia social.